viernes, 1 de agosto de 2014

Capitulo 32. {Novela Willyrex}

Llegue corriendo hasta la orilla de la playa, donde me senté y comencé a llorar desconsoladamente, no sabia que hacer con mi vida en estos momentos, había pasado por mi cabeza lo de irme a casa de Ainhoa, pero no sabia donde vivía. Saque mi móvil del bolso y marque su numero;

Ainhoa: Hola amor.
Leire: Ainhoa, por favor, necesito verte. -Dije entre lágrimas-
Ainhoa: Eh, Leire, mi niña, ¿donde estas?. -Dijo asustada-
Leire: En la playa, ¿podemos quedar en la tienda de tatuajes?
Ainhoa: Estoy ahí en diez minutos.

Al cabo de unos diez minutos, llego Ainhoa, la cual me dio un calido abrazo;

Ainhoa: ¿Que ha pasado?
Leire: ¿Podemos ir a tu casa, por favor?
Ainhoa: Claro, vamos.

Llegamos a casa de Ainhoa, no estaba muy lejos de la mía;

Ainhoa: ¿Puedes contarme ya lo que ha pasado?
Leire: Si.

Le explique a Ainhoa todo lo que había pasado, lo que había visto y porque estaba así;

Ainhoa: ¿Y si era algún familiar suyo?
Leire: Me hubiera avisado de que venia alguien de su familia.

Mi móvil comenzó a sonar, mire la pantalla, Willy;

Leire: ¿Que quieres, Willy?
Willy: ¿Te falta mucho?
Leire: Olvidame Guille, tienes a tu otra novia contigo, ¿no?
Willy: ¿Como?
Leire: Os he visto, a los dos, por favor, olvidame.
Willy: Pero Leire, no es lo que piensas, ella era... -Colgué-

No quería escusas baratas. Ainhoa me ofreció quedarme el tiempo que quisiera en su casa, tenia una habitación libre. Me tumbe en la cama y me dormí entre un mar de lagrimas de dolor y rabia.

No hay comentarios:

Publicar un comentario