Vegetta y mi hermana vinieron a casa a darnos una noticia, según ellos, bastante importante;
Willy: ¿Y cual es la noticia tan importante?
Sara: Estamos juntos, somos pareja.
Vegetta: Quiero ser el padre de ese bebe y ser pareja de Sara.
Leire: Dios mio, me alegro muchísimo chicos, os merecéis algo bueno.
Willy: Enhorabuena chicos, mucha suerte.
Salimos los cuatro a comer por ahí para celebrarlo, comimos en un restaurante al lado del mar y vi a Ainhoa a lo lejos, así que me acerque a ella;
Leire: ¡Ainhoa!
Ainhoa: Hola mi niña. -Dijo dándome un abrazo-
Leire: ¿Que tal?
Ainhoa: Muy bien, últimamente estoy hablando bastante con Rubius, puede salir algo de aquí...
Leire: Me alegro mucho, cuando menos te lo esperes te hace una visita. -Dije riendo-
Ainhoa: Puede ser que venga la semana que viene...
Leire: Tu acuerdate de mis palabras, yo lo acierto todo, dije que Vegetta y mi hermana tendrían algo y así es, están juntos, ahora Vegetta es papa. -Dije riendo-
Ainhoa: ¿En serio? Que fuerte y que adorable.
Leire: Pues si...
Ainhoa: Si viene Rubius y va a tu casa, avisame, por favor.
Leire: Por supuesto. Me tengo que ir, nos vemos.
Ainhoa: Adios. -Dijo dándome un abrazo-
Llegamos a casa, Vegetta y Sara se fueron a la suya y Willy se puso a editar y yo salí a correr, echaba de menos no correr con Rubius. Fui a cruzar una carretera cuando de repente escuche un ruido horrible, di un grito ahogado y lo vi todo negro.
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