A la mañana siguiente me levante rápidamente, tenia 10 minutos para arreglarme antes de que llegara Ruben, me puse un short con una camiseta básica y mis Vans. Cogí mi bolso rápidamente y baje corriendo, Ruben ya estaba allí;
Ruben: Por fiiiiiiin...
Laia: Lo siento, me levante tarde. -Dije poniendo cara de cachorrito-
Ruben: No pasa nada, venga, vámonos.
Fuimos andando hasta una tienda de electrónica y empezamos a mirar ordenadores, finalmente me decidí por un MacBook pro, según Ruben, era de los mejores, pague y salimos fuera;
Laia: ¿Que te parece si te vienes a casa y estrenamos mi piscina?
Ruben: Mmm, me gusta, pero no tengo bañador.
Laia: Hay una tienda de ropa aquí al lado...
Ruben: Venga, vale.
Ruben se compro un bañador, compramos comida en el McDonals y subimos hasta casa, comimos al lado de la piscina y nos metimos dentro;
Ruben: Estoy por quedarme aquí a vivir, esto es de lujo.
Laia: Te recuerdo que tu también tienes una piscina.
Ruben: Si, pero yo la tengo que compartir con toda la urbanización.
Pasamos la tarde entre risas y tomando el sol en mi azotea hasta que Ruben se fue a casa, me sentía vacía después de pasar todo el día junto a el.
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