viernes, 27 de noviembre de 2015

Capitulo 24. {Novela Vegetta}

Pase el resto del día pensando que me podía poner esta noche, al final me decante por un vestido verde agua y unos tacones negros. Mi cabeza no dejaba de recordar mi primera cita con Samuel, fue muy similar a esta, pero no sería igual ya que con Samuel ocurrió todo en una noche, con Raúl voy a intentar ir poco a poco. Llego el momento de la cena y me fui para casa de Raúl, aparque el coche frente a su casa y pude verle en la puerta con una rosa en la mano;

Raúl: Buenas noches, preciosa.
Ainhoa: Buenas noches. –dije dándole dos besos y cogiendo la rosa-

Entramos dentro de la casa, todo adornado de velas que conducían al jardín perfectamente adornado con flores muy bien cuidadas. Me sente en una silla bastante nueva diría yo y espere a que Raúl trajera la comida;

Ainhoa: No hacia falta que pusieras todo tan bonito.
Raúl: Te lo mereces, esto y mas. –dijo mirándome a los ojos-

Era la segunda persona a parte de Samuel que se había atrevido a decirme algo tan bonito mirándome fijamente a los ojos;

Ainhoa: Me encanta tu casa, es preciosa. –dije mirando alrededor-
Raúl: Me costó mucho dejarla así de bonita.

Terminamos la cena y nos sentamos en un enorme sofá mirando a las estrellas;

Raúl: ¿Sabes que soñé anoche? –dijo girando la cabeza hacia mi-
Ainhoa: Cuéntame y sorpréndeme, una vez más. –dije mirándole también-
Raúl: Soñé contigo, no sé que me está pasando estos meses desde que te vi en la agencia estoy obsesionado contigo, me imagino una vida a tu lado, un futuro juntos, pensando en esa mirada perdida, en esa cabeza que rondan miles de pensamientos en un mismo segundo, ayer cuando mi madre nos presento me pareció mentira, por fin podría tener una relación mas cercana contigo. –dijo sin apartar la mirada-
Ainhoa: ¿Y por qué no me hablaste antes?
Raúl: Marina me aviso de que hacía poco que habías salido de una relación y no quería liar tus pensamientos…

En ese mismo momento vi como Raúl dio un impulso y quedamos muy juntos, a escasos centímetros de mi, haciendo que nuestros labios se juntaran poco a poco con dulzura.

No hay comentarios:

Publicar un comentario