Tras pasar toda la tarde en la universidad repasando el examen de mañana, me fui a casa, no estaba aquí desde ayer.
Saque mi enorme maleta rosa de encima del armario y metí toda la ropa y zapatos que me había regalado Willy hoy.
De repente recibí una llamada, número desconocido;
Leire: ¿Si?
X: Hola zorra. -Era la voz de una chica-
Leire: ¿Quien eres?
X: Eso no te importa.
Leire: ¿Y para que me llamas?
X: Deja a Willyrex, no te lo mereces.
Leire: ¿Y tu que sabes?
X: Te conozco, demasiado.
Leire: Pues me conozcas o no, que sepas que no lo pienso dejar. Adiós.
Y colgué. No tenia ni idea de quien podía haberme llamado para hacerme esa especie de obligación. Decidí olvidar el tema y ver los últimos vídeos que Willy habia subido.
Eran las 2:00 de la mañana así que me puse a estudiar ya que a las 8:30 tenia que estar en la universidad y no tenía sueño, en el avión dormiría.
De repente me llego un WhatsApp, Willy;
Willy: ¿Que haces todavía despierta tan tarde en vez de estar descansando para el examen?
Leire: Estoy estudiando. No voy a dormir. ¿Y tu que tal?
Willy: Pues yo estoy en el aeropuerto esperando a Vegetta, por una vez que no me tiene que esperar el a mi...
Leire: Mañana me toca a mi viajar solita...
Willy: Pero lo que te espera en LA lo compensa todo.
Leire: Ahí tienes razón.
Willy: Bueno, te dejo estudiar, mañana cuando acabes el examen, avisame.
Leire: Perfecto, te quiero.
Bloquee el móvil y seguí dandole los últimos repasos a las leyes.
Eran las 8 de la mañana y ya estaba de camino a la universidad, si todo salia bien, podría tener el examen terminado antes de las 12.
Entre en la enorme aula y me senté en mi sitio de siempre. Saque mis apuntes y di los últimos repasos antes de que entrara el profesor. Este llego y repartió los difíciles exámenes. Me jugaba en este examen el pasar o no a mi tercer año de carrera.
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