Llegamos a Los Ángeles y tras bajar de nuestro avión pudimos ver a lo lejos a Nina, Leire, Samuel y Willy con un cartel que ponía `"Bienvenidos a casa, futuros casados". Mi única reacción fue ponerme las manos en la boca e ir corriendo a abrazarlos, los cuales me dieron un abrazo de grupo, me sentía como con mi familia, ellos eran mi familia;
Laia: Sois los mejores, muchas gracias por todo.
Nina: Te mereces esto y mucho mas.
Nos montamos como pudimos en el coche de Leire y volvimos a casa;
Ruben: Por fiiiiiin en casa.
Laia: Pues tu no querías volver.
Ruben: Lo se, pero como en casa en ningún sitio.
Laia: Ven aquí.
Se acerco a mi e hice una foto de ambos y la subí a Twitter. Lo que yo no sabia es que esa foto era la que mas drama iba a montar en esa red social;
Ruben: Laia…
Laia: ¿Qué pasa?
Ruben: En la foto se ven los anillos.
Laia: Mierda.
Cogí mi móvil corriendo y elimine el Tweet, pero fue en vano. La gente ya tenia la foto en sus móviles y circulando por todos lado. Pasamos el resto del día aguantando el móvil sonar por las notificaciones y decidimos salir a cenar, eso si, dejando los móviles en casa;
Ruben: Conduzco yo.
Laia: ¿Seguro?
Ruben: Tranquila, se conducir.
Ruben arranco el coche y empezó a acelerar, en ese mismo momento el semáforo se puso en rojo y Ruben no pudo frenar, hasta tal punto de colisionar con otro coche mas grande que el mio, pude escuchar un ruido increíble y un "Lo siento" de Ruben.
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