Capítulo 43. {Novela Vegetta}

Samuel se acerco hasta donde estábamos Nina y yo, esperando una explicación de por qué esa chica estaba en nuestra habitación. Le explicamos todo lo que había ocurrido en aquel crucero y lo más importante, que su hermana estaba viva;

Samuel: No me lo puedo creer, todos estos años creyendo que estaba muerta y resulta que estaba aquí. –dijo poniendo sus manos en la cara-

Nina: Os puedo llevar a casa y así la ves.

Samuel: Si, vamos.

Pedimos a uno de los chofers que nos llevara y llegamos hasta un bloque de pisos bastante altos, no eran de los mejores de la ciudad. Subimos hasta el último piso y mi hermana abrió la puerta dejándonos entrar a nosotros primeros y haciéndonos que nos encontráramos con mi madre y la hermana de Samuel en el salón;

Ainhoa: ¡¡MAMA!! –dije abrazándome a ella y llorando-

Samuel: ¡¡EVA!! –dijo Samuel cogiendo en brazos a su hermana-

Mama: ¿Ainhoa? –pregunto mi madre-

Nina: ¿Te acuerdas de ella, mama? –pregunto mi hermana alucinando-

Mama: Si, me acabo de acordar de todo. –dijo mi madre sonriendo-

Ainhoa: Te he echado tanto de menos, mama. –dije llorando aun mas-

Después de relajarnos un poco después de tantas lagrimas, nos sentamos tranquilamente para hablar;

Eva: ¿Cómo están papa y mama?

Samuel: Bien, aun triste por ti, van a alucinar cuando vuelvas. –dijo abrazandola-

Ainhoa: ¿Cómo nos encontraste, Nina?

Nina: Llevo varios años siguiendo a los youtubers, Samuel entre ellos, entonces vi que venían a Chile y quise conocerlos ya que me quede sin entradas para el evento, pero estando abajo del hotel, vi que Samuel twitteo esa foto contigo y supe sin dudar que eras tu, el resto ya lo sabes. –dijo sonriendo-

Samuel: Ahora lo importante es que Ainhoa y yo nos vamos a encargar de conseguiros los pasaportes y volver a España.

Nos despedimos de las chicas y de mi madre y tuvimos que volver al hotel ya que teníamos que irnos todos juntos para el lugar del evento ya que tenían que probar sonido y ensayar el show para mañana. Al terminar los ensayos fuimos hasta la embajada española en Chile y conseguimos arreglar el asunto de los pasaportes, dentro de dos días podrían volver a España;

Ainhoa: Todo esto es surrealista, estoy en una nube ahora mismo, entre esto de la fama y lo del crucero, mi vida parece una mentira.

Samuel: Si, ha sido un día bastante entretenido.

Ainhoa: ¿Les has contado a tus padres lo de tu hermana?

Samuel: No, mañana los llamare cuando este con ella. –dijo abrazándome-